Fuente: Ultima Hora
28/04/2010 - 06:37 AM Por Agencias
CD. Victoria, Tam. Las corporaciones policiacas de Tamaulipas enfrentan una desbandada sin precedentes de sus elementos, quienes ante la falta de garantías en su trabajo y luego de una ola de asesinatos contra sus compañeros, están prefiriendo abandonar su labor.
Aunque oficialmente no existen cifras de cuantos policías han renunciado o abandonado sin aviso su trabajo, fuentes extraoficiales revelan que "son muchísimos".
El problema más grave ocurre en las policías preventivas de municipios como Victoria, San Fernando, Matamoros, Reynosa, Nuevo Laredo, Valle Hermoso y toda la frontera chica, además de la Policía Metropolitana en el sur del estado.
"Los policías vienen y presentan su renuncia y cuando no se las aceptan simplemente abandonan su trabajo" dijo un comandante de la Policía Municipal de Reynosa.
En la Policía Ministerial las cosas son parecidas: durante los dos últimos meses al menos medio centenar de agentes han decidido dejar sus plazas , y buscan que el Gobierno del Estado les liquide al menos medianamente por los años de trabajo dedicados a la corporación.
"Nos dijeron que posiblemente vayan a abrir un programa de retiro voluntario en el que nos darían alguna indemnización, y por eso estamos esperando, pero yo como muchos de mis compañeros simplemente ya no fuimos a nuestras comandancias" dice uno de los investigadores.
Historias parecidas se repiten hacia el interior de corporaciones como la Policía Rural, Policía Estatal Preventiva y Policía Especial de Tamaulipas. Incluso dentro del sistema penitenciario, suman decenas los custodios que están renunciando.
El principal argumento que esgrimen los agentes de la ley es de que no tienen garantías en su trabajo, porque con un equipo deficiente y obsoleto, pero con insuficiencia de personal, son absolutamente vulnerables frente a la delincuencia.
"Es como si uno se estuviera suicidando. Somos vulnerables frente a cualquier delincuente y todo eso por un sueldo miserable que apenas alcanza para medio comer, no tiene caso" refiere un agente ministerial con casi 20 años en la corporación.
La desbandada policial esta convertido en un serio problema para ayuntamientos y el Gobierno del Estado, porque mientras que la renuncia de elementos continua a diario, no hay personas interesadas en reemplazarlos.
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