sábado, 7 de agosto de 2010

Rescatan a levantados; uno estaba muerto

Fuente: El Porvenir
Por: El Porvenir/ Especial, Sábado, 07 de Agosto de 2010

El hijo de un transportista de Reynosa fue ejecutado en el municipio de Cadereyta.



El hijo de un transportista de Reynosa fue ejecutado en el municipio de Cadereyta, donde elementos del Ejército rescataron el cuerpo que se encontraba amordazado en una camioneta junto con otras dos personas golpeadas y aún con vida que habían sido levantadas dos días antes.
Los efectivos militares realizaron el hallazgo luego de una persecución por calles de la colonia Alfredo V. Bonfil, en Cadereyta, después de ver una camioneta Durango con placas SET 1887 sospechosa y a la que le marcaron el alto pero se dio a la fuga.
El ahora occiso fue identificado como Hugo Román Amaya Garza, de 27 años de edad, mientras que los levantados sobrevivientes son, Mario Alberto Cruz Rosas, de 24, y Francisco Javier Rico Salazar, de 31, los dos últimos auxiliados por la Cruz Verde al presentar múltiples golpes.
La Durango en la persecución chocó contra una camioneta estacionada a la que se le desprendió la llanta trasera del lado izquierdo en el cruce de las calles Irene Gómez Reyna y Josefa Zozaya, siguió avanzando unas calles así chocada y se detuvo frente a una tortillería en Pedro M. Anaya y Juan Escutia, de donde descendieron los sospechosos, entre tres y cuatro personas, quienes se dieron a la fuga.
La unidad militar se vio averiada al pegar con la llanta desprendida de la camioneta, pero pudo continuar y al llegar al sitio donde quedó la Durango y realizaron una inspección detectaron tres personas amordazas, una de ellas sin vida, Amaya Garza.
En el interior de la camioneta se encontró un arma revólver calibre .22 largo, mismo que fue inspeccionado por personal de Servicios Periciales de la Procuraduría de Justicia de Nuevo León, quienes además revisaron el cadáver de Hugo Ramón Amaya, al que no le encontraron impactos de bala, sólo golpes que al parecer fue lo que le provocó la muerte.
Hugo Román es hijo de un transportista de Reynosa, Tamaulipas, su papá le prestó un camión para hacer una entrega a Torreón, Coahuila, y lo acompañó el machetero Mario Alberto, quienes venían de regreso y la noche del lunes, al pasar por el puente de cuota de Cadereyta, fueron interceptados por personas armadas que los levantaron, cerca de las instalaciones de la Policía de ese municipio.
Antes de ser levantados, Hugo Román y Mario Alberto subieron a Francisco Javier, domiciliado en Ciudad Benito Juárez, Nuevo León, al que le daban un raid a Los Ramones.
Los levantados señalaron que al momento de que los interceptaron los militares, lo único que sabían era que los llevaría a tirar, sin saber a qué parte, pero antes los estuvieron golpeando y torturando, aparentemente como un mensaje para la gente de Reynosa.
Elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones, que hicieron una vaya junto a la camioneta para tratar de impedir que fuera captado el momento en que era revisada la Durango de los secuestrados y el cuerpo del fallecido, se hicieron cargo de los hechos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Hola bienvenido, este es un espacio para que expreses tu opinion en forma libre. Usalo con responsabilidad