viernes, 25 de junio de 2010

Amenaza el narco la operación de Pemex en Tamaulipas y NL

Fuente: Milenio
Suárez Coppel acepta que cinco empleados del pozo Gigante Uno están secuestrados. El subdirector de Exploración asegura que los bloqueos también son comunes.
Vie, 25/06/2010 - 07:45
El director general de la empresa compareció ayer ante la Comisión Permanente. Foto: Omar Meneses

México.- Directivos de Petróleos Mexicanos (Pemex) aceptaron que las organizaciones del narcotráfico se han convertido en un obstáculo para la operación de la empresa en el norte del país y confiaron en que las labores del Ejército mexicano ayuden a resolver el problema.
En su comparecencia ante la Comisión Permanente, el director de la paraestatal, Juan José Suárez Coppel, admitió que en mayo pasado fueron secuestrados cinco trabajadores del pozo Gigante Uno, de la cuenca de Burgos, y si bien se presentaron las denuncias correspondientes, “hay preocupación” entre directivos de Pemex.
El subdirector de Exploración y Producción, Carlos Morales, confirmó que “en la zona norte de Tamaulipas y el norte de Nuevo León se vive una serie de circunstancias complicadas para operar”.
El funcionario, quien participó también en el encuentro con legisladores, confirmó que las organizaciones criminales han bloqueado accesos de algunas instalaciones petroleras en esas entidades, aunque no de forma permanente.
Morales precisó que además de los secuestrados, en la zona de El Gigante Uno, en Nueva Ciudad Guerrero, Tamaulipas, “hay algunas áreas en las que hay impedimento para transitar”.
De acuerdo con el diputado priista Jorge Carlos Ramírez, un asesor de Pemex reveló que no pueden hacer nada. “Nos confesó que tienen convenios con el Ejército, pero que no les han servido de mucho. También se nos dijo que no es un pozo, sino un centro de distribución que está cerrado”.
Suárez Coppel compareció para explicar los avances del proyecto de la refinería de Tula, del cual dijo que “va y va bien”. También habló del impacto que puede tener el derrame de petróleo del golfo de México en costas nacionales y de las investigaciones contra María del Carmen Miyasaky, subdirectora de Destilados Intermedios, por presunto fraude a la paraestatal.
Casi al término de la comparecencia, Jorge Carlos Ramírez hizo referencia a la versión de que una célula de Los Zetas mantiene secuestrado a personal del pozo de la cuenca de Burgos, pero el formato de la comparecencia impidió la respuesta del funcionario.
En entrevista posterior se le preguntó a Suárez Coppel si tienen identificados a los grupos criminales que operan en Tamaulipas y Nuevo León, pero respondió que Pemex no es autoridad para hacerlo, aunque sí ha colaborado con las autoridades entregando información.
“Trabajamos con las autoridades federales; en lo que corresponde a nosotros, hemos presentado las denuncia y (aceptamos que) es algo también que nos preocupa mucho”, señaló.
“Como saben, hay problemas graves de seguridad (en esa zona) y estamos trabajando con las autoridades, que nos han ayudado mucho; tenemos convenio con ellos y estamos trabajando.”
El director de Pemex Exploración y Producción confirmó esta versión, al señalar que en la cuenca de Burgos hay dificultad para transitar “en algunas zonas y en algunos momentos, pero no es algo permanente. Eso es lo que dificulta las operaciones, ese es el estatus que tenemos hoy”.
—¿La amenaza sigue ahí?
—Todos sabemos que no ha terminado el tema y las autoridades están haciendo lo procedente. Están actuando las secretarías de Marina y de Seguridad Pública, el Ejército también está teniendo una actividad ahí, de tal manera que esperamos que esta situación se regularice pronto.
Carlos Morales indicó que dos de las cinco personas secuestradas trabajan para una empresa contratista llamada Tecpetrol.
—¿Tampoco han aparecido?
—Tampoco.
- Claves
“No está tomado”
• El director general de la paraestatal y el subdirector de Pemex Exploración y Producción precisaron que el pozo Gigante Uno, de la cuenca de Burgos, no está tomado por el narco, pero “prácticamente se tuvo que cerrar porque no hay condiciones de seguridad para que la gente llegue a trabajar”.
• Lo anterior fue confirmado por el diputado priista Jorge Carlos Ramírez, quien señaló que “periódicamente estos grupos armados le cierran el paso a los trabajadores de Pemex y por eso se optó por cerrar”.
Angélica Mercado y Heliodoro Cárdenas

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