Fuente: Noticias Prodigy
21/06/2010
Crea una unidad de vinculación ciudadana
MEXICO (AP) -- El ejército anunció la creación de una "unidad de vinculación ciudadana" para dirimir conflictos generados con la sociedad por su participación en el combate al narcotráfico, en momentos en que militares se encuentra en el centro del debate por presuntamente alterar una escena para ocultar que soldados dispararon directamente contra civiles.
"La unidad tendrá por objeto generar los acercamientos necesarios para la solución de conflictos entre el Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos y la sociedad en general, ocasionados con motivo de la presencia militar en las calles, desarrollando una metodología para establecer, articular y mantener una adecuada y efectiva comunicación entre los citados interlocutores", señaló la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en un acuerdo publicado el lunes en el Diario Oficial.
El anuncio ocurre casi cuatro años desde que el presidente Felipe Calderón desplegó a miles de soldados a las calles para apuntalar su ofensiva contra el narcotráfico y el crimen organizado. Durante ese período, algunos militares han sido acusados de cometer abusos a los derechos humanos. El más reciente caso involucra al ejército en el homicidio de dos menores en el estado norteño de Tamaulipas.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) divulgó la semana pasada un informe en el que responsabilizó a soldados de la muerte el 3 de abril de dos niños, de 5 y 9 años, en una carretera de Tamaulipas y de alterar la escena para hacer creer que fallecieron en un enfrentamiento con sicarios del narcotráfico.
Tras el informe de la CNDH, organismos como Amnistía Internacional y Human Rights Watch llamaron al gobierno a que cualquier abuso de soldados contra civiles sea investigado por autoridades civiles, y no militares.
El gobierno aún analiza el informe para responder en los próximos días, pero en principio lo calificó de "descontextualizado", por no haber considerado las indagatorias que realizó el ejército y sólo contar con las versiones de las víctimas.
En su anuncio del lunes, la Sedena señaló que la nueva unidad estará integrada por militares, aunque podrá invitar a participar a civiles "con conocimiento y experiencia en políticas públicas y vinculación ciudadana".
Integrar civiles, añadió, "constituirá una señal favorable a la población civil y la comunidad internacional, de que el Estado mexicano está generando los acercamientos necesarios para la debida atención de la ciudadanía, ante los conflictos que traen aparejada la presencia militar en las calles".
En algunos momentos en los últimos años se han presentado protestas en las que gente pide la salida del ejército del combate al narcotráfico, aunque el gobierno ha advertido que muchas de ellas fueron promovidas por el mismo crimen organizado para manchar la reputación de las fuerzas armadas.
Jorge Chabat, experto en narcotráfico y seguridad nacional del Centro de Investigación y Docencia Económicas, se mostró cauto ante los resultados que pueda tener la unidad, aunque consideró que refleja una "preocupación por las críticas que se han hecho al ejército en los últimos años en el tema de los derechos humanos, tanto de dentro como fuera de México".
"En principio, es una buena noticia, que habrá más comunicación (con la sociedad), pero no estoy muy seguro que por sí sólo vaya a ser una gran diferencia", dijo a la AP Chabat, para quien se deberían establecer, además, protocolos y controles más rigurosos sobre el uso de la fuerza en el combate al narco.
Dijo que si bien podría discutirse si algunas de las acusaciones de violación de derechos humanos por militares eran evitables o no, lo cierto es que "hay casos perfectamente demostrados".
En marzo, el procurador de Justicia Militar, general José Luis Chávez, dijo que algunos militares cometen errores graves y delitos, pero rechazó que se trate de violaciones sistemáticas a los derechos humanos.
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